Hay fechas que quedan marcadas a fuego en el calendario, que son eternas y no se borran ni se borrarán jamás de la memoria del futbolero que ama al deporte más hermoso del mundo. Y más aun, cuando hablamos de la camiseta más sagrada que tiene el fútbol en nuestra tierra: la de la Selección Argentina.
Aquel 27 de Febrero de 1977, nació uno de los amores más importantes y relevantes que nos regaló este suelo argento: Diego Armando Maradona y el seleccionado Nacional. En la mismísima Bombonera y en un categórico 5 a 1 frente Hungría, esa tarde el diez puso primera con la Selección Mayor, al ingresar en el segundo tiempo por Leopoldo Jacinto Luque.
En declaraciones a Daniel Arcucci para la bibliografía autorizada: «Yo soy el Diego», Maradona contó sus sensaciones: «Me temblaron las piernas y las manos. Era un ruido bárbaro: la tribuna gritaba, lo que me había dicho Menotti me sonaba en la cabeza. Lo digo honestamente, tenía un julepe bárbaro».